Docentes en Mozambique: más allá de la escuela

17-09-2021 Lectura 4 Minutos
Noemí García y Julián Donoso
Comunicación y contenidos

Las y los docentes en Mozambique hacen mucho más que enseñar las asignaturas que formalmente se encuentran establecidas en los planes del Estado. En nuestra estrategia de trabajo les incluimos, al igual que a otros actores sociales, como verdaderos guardianes de los derechos de la infancia. Hoy te explicamos una iniciativa pionera de formación del profesorado en Mahelane, Michambulene y Changalane, cerca de Maputo.

¿Qué le ocurre a la infancia en Mozambique?

En Mozambique la infancia que vive en situación de pobreza es especialmente vulnerable. Las familias no están siempre presentes, algunos niños y niñas son huérfanos o están perdidos debido a situaciones de emergencia, como la que actualmente ocurre en Pemba. Según cuenta Sonia Helena Bernardo, técnica de vínculo solidario en nuestros proyectos de Maputo, “es frecuente encontrarnos con casos de niños y niñas que viven en entornos de violencia doméstica o sufren una separación de sus familias, que pasan largas temporadas fuera para trabajar”. Otros, ‘simplemente’, sufren una brutal ausencia de cariño.

En esta situación de vulnerabilidad los menores, y sobre todo las niñas, se sienten obligadas a aceptar propuestas deshonestas empujadas por tradiciones –todavía vigentes en algunas zonas rurales remotas– o de personas cercanas como parientes directos o vecinos de la comunidad.

La consecuencia para ellas es que, al convertirse en víctimas del acoso, suelen dejar el colegio, se aíslan socialmente, quedan embarazadas…

Condicionan toda su vida, y aunque están protegidas por instrumentos legales, no los usan porque los desconocen.

Docentes en Mozambique: protectores de la infancia

Enmarcada en nuestra estrategia de intervención, la iniciativa de formación a docentes en Mozambique consiste en formar a profesores y profesoras (pero también a otro personal de los centros educativos) para que jueguen un papel activo en la protección infantil en casos de violación de derechos de la infancia. Durante meses hemos trabajado para que el cuerpo docente de las comunidades donde trabajamos a través del apadrinamiento cuente con herramientas que les permitan dar respuesta a casos de violación de derechos.

Acaba de terminar la primera formación, que se ha impartido a 47 profesores y profesoras, y podemos decir que ha sido un éxito, aunque siempre hay cosas que mejorar:

En el futuro nos gustaría poder incluir a más profesoras, porque vemos que ellas pueden implicarse en asuntos más sensibles relacionados con aspectos culturales y el desarrollo de la pubertad de las niñas.

Profesores en Mozambique

Formaciones para docentes en Mozambique: en qué consisten

Durante el tiempo que duran las formaciones realizamos diferentes actividades que mejoran el conocimiento del alumnado y la respuesta ante casos concretos:

  • explicamos leyes y mecanismos legales relacionados con la protección infantil.

  • revisamos el comportamiento de niños y niñas en caso de abandono, discriminación o exclusión.

  • pedimos a profesores y profesoras estar atentos al comportamiento de los menores en caso haya algún cambio porque pueden ser señales que ayuden a detectar un posible abuso.

  • explicamos que todas las entidades de base están implicadas y los mecanismos de denuncia pueden activarse a todos los niveles.

Como aprendizajes, hemos detectado que existe una gran necesidad de formaciones como esta, ya que Ayuda en Acción es la primera ONG que realiza una actividad como esta en sus comunidades. Para próximas ediciones, que las habrá dado el éxito obtenido, estamos valorando la idoneidad de que en la formación estén también presentes alumnos y alumnas que puedan apropiarse de los derechos que les corresponden.

También hay temáticas en las que los propios docentes están solicitando ser formados/as: los embarazos prematuros, integración de los niños en el cole o cómo implicar a familias en la enseñanza de sus hijos e hijas.

Aprendizajes tras la COVID-19 para los docentes en Mozambique

Pero si hablamos de aprendizajes para los docentes en Mozambique, como en el resto del mundo, la COVID-19 ha significado un punto de inflexión. Mozambique continúa en un estado de calamidad pública. Esto condiciona la presencialidad en las aulas, que por el momento es rotativa tras meses en los que la ausencia fue total.

Los y las docentes han tenido que aprender a lidiar con esta nueva forma de enseñar a la distancia. Además de todo ello, hacen un gran esfuerzo para mantener las medidas de seguridad que eviten contagios en la escuela. A diferencia de países como España, la mayoría de los niños y niñas no tienen acceso a ordenadores en las casas.

En momentos de confinamiento eran los padres y madres quienes se acercaban a los centros educativos a buscar las lecciones de los niños. Los viernes iban a dejar los ejercicios que habían hecho durante la semana. Ahora parece que vamos a volver a la normalidad. Los docentes en Mozambique ya están vacunados de la primera dosis.

Los docentes saben lo que han vivido gran parte de los niños y niñas de Mozambique durante la pandemia. Han pasado mucho tiempo solos, por lo que sus familias no podían garantizar que cumplieran los protocolos anticovid. Por eso, además de la formación a docentes insistimos en la necesidad de sensibilizar a toda la sociedad. Es lo que hacemos en las jornadas de vínculo solidario.